Este diario nace de cuero curtido vegetal, tanto en su tapa exterior como en los detalles internos: un proceso lento y respetuoso que solo utiliza cortezas de árboles y agua, sin químicos ni metales pesados. Por eso su tacto es tan vivo, su aroma tan auténtico y su envejecimiento tan bello.
La tapa, teñida en un rojo granate intenso, lleva grabada a mano la silueta de la Diosa en postura de árbol: un pie firmemente enraizado, brazos abiertos al cosmos, los siete chakras marcados como pequeños soles a lo largo de su cuerpo. Alrededor, lunas crecientes, soles radiantes y espirales que recuerdan el ciclo eterno.
Al abrirlo, las hojas de papel reciclado artesanal –con ese borde irregular tan característico del hecho a mano– te invitan a escribir sin reglas. No hay líneas que te limiten, solo espacio sagrado para tus intenciones, sueños, cartas a la luna o gratitudes al amanecer.
El elástico negro lo abraza con fuerza, guardando tus palabras hasta que estés lista para volver a ellas.
Tamaño pequeño: 18 × 13 × 2,5 cm – ideal para llevar siempre contigo o dejar en tu altar. Tamaño mediano: 20,5 × 15,5 × 2,5 cm – más espacio para quienes escriben largo y profundo.
Cada vez que lo abras sentirás la calidez del cuero curtido vegetal bajo tus dedos y recordarás que estás sosteniendo algo hecho con conciencia, desde la piel hasta la última hoja.
Frecuencia asociada: 396 Hz (liberar bloqueos) + 639 Hz (conexión y armonía). Chakras: Muladhara (rojo – raíz) y Sahasrara (corona) por la postura que une tierra y cielo. Intención recomendada: equilibrio, enraizamiento y apertura espiritual.
Ritual breve: antes de escribir, pasa la palma por la Diosa grabada, respira hondo y susurra “Raíz y corona, estoy completa”.
